ORACIÓN SUBORDINADA
Una oración subordinada (también llamada oración
secundaria) es una oración que depende estructuralmente del núcleo de otra
oración, llamada oración principal. Es decir, la oración subordinada es una
oración que es a su vez un constituyente sintáctico de otra. Y, por tanto, la oración
subordinada no tiene una autonomía sintáctica (si es considerada sola) y es
"subordinada" por otra, llamada principal, a través de nexos diversos
según su tipología: conjunciones, pronombres relativos, adverbios
conjuntivos... El procedimiento sintáctico que une ambas oraciones, principal y
subordinada, se denomina subordinación o hipotaxis, y es distinto de los otros
dos que existen para ligar oraciones: la coordinación o parataxis y la
yuxtaposición.
INTRODUCCIÓN
Las
oraciones subordinadas son siempre constituyentes sintácticos de la oración
principal, por lo que su clasificación tiene mucho que ver con la función sintáctica que desempeñan como
constituyente sintáctico dentro de dicha oración principal. Las oraciones subordinadas adjetivas,
por ejemplo, desempeñan funciones propias del sintagma
adjetivo, casi siempre como adyacente de
un sustantivo antecedente en la proposición principal, las subordinadas sustantivas la de un
sintagma nominal sujeto o complemento directo, indirecto etc. del verbo la
proposición principal, y las subordinadas adverbiales la
de complemento circunstancial del verbo
de la proposición principal.
TIPOS DE
ORACIONES SUBORDINADAS
Desde
el punto de vista de la sintaxis o función sintáctica de la oración
subordinada, es común distinguir varios tipos de oraciones subordinadas:
·
Subordinadas sustantivas. Aquellas oraciones subordinadas que cumplen las
funciones de un sintagma nominal (sujeto, complemento directo, complemento de
preposición, etc.)
·
Subordinadas adjetivas. Incluyen una oración subordinada como parte de un
sintagma nominal (sujeto o complemento). La oración relativa habitualmente está
precedida por las palabras que, el cual, la
cual, quien, cuyo, cuya, etcétera, y
modifica el nombre de la oración subordinante o principal, como lo haría un
adjetivo.
·
Subordinadas adverbiales (subdivididas en circunstanciales -de
tiempo, lugar, modo y comparación- y lógicas -condicionales,
causales, consecutivas, concesivas y finales-). Este tipo de oraciones
modifican al verbo. Se clasifican de la misma manera que los complementos
circunstanciales de la oración simple.
Se
consideran inordinadas todas las anteriores salvo las lógicas, porque todas
cumplen alguna función sintáctica dentro de la proposición principal; las
lógicas, sin embargo, no cumplen ninguna función sintáctica clara y se utilizan
como operadores lógicos para ordenar o procesar ideas y deberían ser
denominadas más propiamente subordinadas.
SUBORDINACIÓN SUSTANTIVA
Las
proposiciones subordinadas sustantivas desempeñan funciones sintácticas propias
del sustantivo: sujeto, objeto
directo, complemento de régimen o suplemento, complemento del nombre... Van introducidas
por los nexos que, el que, el hecho de que,
por pronombres interrogativos
como qué, cuál, quién, o por adverbios interrogativos
como cuánto, cómo, cuándo, dónde etc.,
precedidos o no por preposición.
En el caso de las interrogativas indirectas también puede aparecer el
nexo si. Las proposiciones subordinadas sustantivas se dejan
sustituir por un pronombre neutro: eso, esto etcétera,
o por un infinitivo menos frecuentemente.
Existen
fundamentalmente dos tipos de subordinadas sustantivas en cuanto a su forma o
estructura:
2.
Las que usan verbo
conjugado y sí usan nexo: "Que se lo dijeras fue mala
idea".
En el
segundo de los tipos en cuanto a su forma o estructura el nexo se suele suprimir detrás de verbos
de lengua o verbos que expresen voluntad o mandato:
"Le ordeno se presente inmediatamente en comandancia";
"Pedro dijo: No es necesario". En este último caso se
trata de lo que se denomina estilo
directo, es decir, se reproduce lo que ha sido dicho con exactitud y
en su forma primitiva sin cambios; el nexo es reemplazado por dos puntos,
comillas o guion. Si por el contrario lo que se ha dicho se reproduce sin
respeto a la forma original como fueron pronunciadas las palabras, aunque con el
mismo sentido, se denomina estilo
indirecto y sí existe el nexo: "Pedro dijo que no era
preciso".
Existen
distintos tipos de subordinadas sustantivas según la función sintáctica que
estas desempeñen:
·
Subordinadas sustantivas
en función de sujeto: "Me gusta que
hables francés".
·
Subordinadas sustantivas
en función de objeto directo:
"Me dijo que no vendría". "Me preguntó si
vendría". "Me preguntó cómo había sido".
·
Subordinadas sustantivas
en función de suplemento o complemento de régimen: "Habló de que era mejor no venir".
·
Subordinadas sustantivas
en función de atributo: "El hecho
es que no lo hizo".
·
Subordinadas sustantivas
en función de complemento del nombre:
"Tengo la certeza de que volverá".
·
Subordinadas sustantivas
en función de complemento del adjetivo:
"Parecía feliz de que hubiese encontrado a su cría".
·
Subordinadas sustantivas
en función de complemento del adverbio:
"Ella estaba muy lejos de los que amaba".
·
Subordinadas sustantivas
en función de complemento indirecto:
"Dieron los permisos a los que los solicitaron".
·
Subordinadas sustantivas
en función de complemento circunstancial:
"Iré sin que me lo pidas".
·
Subordinadas sustantivas
en función de complemento agente:
"Los cuadros fueron expuestos por quienes los crearon".
SUBORDINACIÓN ADJETIVA
Las subordinadas
adjetivas o de pronombre relativo desempeñan la
función de adyacentes de un sustantivo o sintagma nominal al que se denomina
antecedente. Van introducidas por pronombres relativos como que (cuando
puede sustituirse por el-la-los-las cual-es), quien o quienes, el
cual, la cual, los cuales, las cuales,
o cuyo, cuya, cuyos-as, precedidos o no de
preposición: "El libro que me prestaste era muy
bueno". Pueden considerarse asimilables a las adjetivas las subordinadas
adverbiales de lugar tiempo y modo introducidas por los adverbios
conjuntivos donde, cuando y como que
llevan antecedente expreso, como en el caso "Ese es el lugar donde
comimos", "Esta fue la época cuando yo estudiaba"
o "Esa fue la manera como lo hicimos", cuyos antecedentes
respectivamente son lugar, época y manera.
Existen tres tipos:
·
Proposiciones adjetivas
especificativas: son las que no van
entre comas y restringen el significado del antecedente seleccionándolo de una
generalidad: "Los jugadores que estaban cansados no
jugaron la segunda parte". (Parte de los jugadores)
·
Proposiciones adjetivas
explicativas: son las que van entre
comas y no restringen el significado del antecedente: "Los
jugadores, que estaban cansados, no jugaron la segunda parte".
(Todos los jugadores)
·
Proposiciones adjetivas
sustantivadas por falta de
antecedente, por no tener antecedente expreso o por otras causas. La
proposición de relativo se enuncia con un valor indefinido y generalizador. Los
pronombres quien y el que equivalen al
sintagma "la persona que". Y el pronombre que al
sintagma "la cosa que". Las nociones de «persona» y «cosa» son los
antecedentes implícitos de tales pronombres. Estas proposiciones desempeñan
funciones propias del sustantivo. Al igual que un adjetivo puede sustantivarse,
también hay proposiciones adjetivas sustantivadas, y como las sustantivas,
desempeñan las funciones propias de un sustantivo: "Los que van a morir te
saludan", (sujeto agente); "Los que estudien serán aprobados"
(sujeto paciente); "Llévate el que elegiste" (complemento
directo); "Yo soy el que te cuidará" (atributo)
SUBORDINACIÓN ADVERBIAL
SUBORDINACIÓN ADVERBIAL PROPIA O CIRCUNSTANCIAL
Existen
tres tipos:
·
Temporales o de tiempo: marcan una referencia temporal a la proposición
principal. Van introducidas por cuando, mientras, antes
que, antes de que, después de que, luego
que, antes que, en seguida, primero al + inf....: Lo
hice cuando me dijiste.
·
Locales o de lugar: marcan una referencia espacial con respecto a la
proposición principal; van introducidas por donde, precedida o no
de preposición: lo hice donde me dijiste.
·
Modales o de modo: muestran el modo como se ejecuta la proposición
principal. Van introducidas por como, según, conforme, como
si: Lo hice como me dijiste.
SUBORDINACIÓN ADVERBIAL IMPROPIA
Existen
seis tipos. Sirven para ordenar las ideas en un continuo que va desde la
condición a la finalidad.
·
Condicionales: señalan una condición necesaria e imprescindible
para que se produzca la proposición principal, sus nexos son: si, en el caso de
que, de + inf. etc.: No conduzcas si bebes
·
Causales: señalan el origen lógico de la proposición
principal, una explicación de la misma; sus nexos más frecuentes son: porque,
ya que, puesto que, por + inf....: Bebo porque tengo sed.
·
Consecutivas: señalan la consecuencia o implicación lógica de
la principal; sus nexos son: por tanto, así que, conque, de manera/modo/forma/
suerte que, luego, así pues, pues etc... Tengo sed, así que bebo.
·
Concesivas: señalan una consecuencia no esperada ni deseada,
o menos lógica que las anteriores, una complicación más que una implicación,
que no impide el cumplimiento de la proposición principal. Sus nexos son:
aunque, por más que, a pesar de que, pese a que, con + inf. etc.: Iré aunque
llueva.
·
Comparativas: comparan la igualdad, inferioridad o superioridad
respecto a la proposición principal. Van introducidas por nexos discontinuos y
el verbo va casi siempre elidido.
·
Finales: indican la consecuencia que está más allá de las
otras consecuencias, la última más allá de las cuales no se espera ninguna, la
aplicación, propósito o cometido de la proposición principal; sus nexos son:
para que, a que, a fin de que, con el propósito/intención/fin/objeto/cometido/recado
de que, para + inf. etc.: Vino para arreglar la puerta.
Subordinadas implícitas y explícitas
En
las lenguas indoeuropeas las oraciones subordinadas
explícitas requieren o pueden llevar un complementador que
las introduzca:
(inglés) John
believes [(that) [Mary is lying]] 'Juan cree que María
está mintiendo'.
(español) Juan
cree [que [María miente]].
(latín) Timeo [ne [veniat]]
'Temo que venga'.
En cambio, las oraciones
subordinadas implícitas o no finitas suelen carecer de complementador:
(inglés) I
want [him to come].
En otras lenguas, como
el náhuatl,
las oraciones subordinadas no adjetivas suelen ser explícitas y no llevan
ninguna partícula introductoria y se logran mediante verbos seriados:
(náhuatl) ni-k-neki
ni-tla-kwa-z.
1ªPER.SUJ-3ªPER.OBJ--querer 1ªPER.SUJ-3ªPER.OBJ.INDEF--comer-FUT
'[yo (ni-)]
quiero (neki) comer ((tla.)kwa-)
Tanto
es así que las oraciones subordinadas desempeñan en el conjunto oracional más
amplio funciones sustantivas, adjetivas o adverbiales, pues han terminado por
sustituir a sustantivos, adjetivos y adverbios por sus formas más complejas.
Así pues, las oraciones subordinadas adoptan el papel de los elementos más
simples de la oración, aumentando su significado y profundidad semántica.
Pueden ser sujeto, complemento directo, indirecto, circunstancial, etcétera.
FUNCIÓN Y
TIPOS EN ESPAÑOL
En la
gramática del español, tradicionalmente se han clasificado
las oraciones subordinadas según el tipo de función que realizan dentro de la
oración principal:
·
Sustantivas: La
proposición subordinada puede desempeñar la función de:
Sujeto "Me disgusta que seas así"
objeto
directo "Me dijo que iría a verte"
Atributo "Mi sueño es que
tenga buena nota"
Suplemento "La televisión
informa de que no hay huelga"
Complemento del nombre "Tengo
la sospecha de que van a decírselo"
Complemento del adjetivo "Estoy
convencido de que aprobaré"
Complemento del adverbio "Ella
estaba muy lejos de los que amaba"
·
Adjetivas o relativas: La proposición subordinada funciona como adyacente de
su antecedente. El antecedente es un sustantivo, pronombre o
elemento nominal que aparece en la proposición principal y al que se refiere el
relativo. Pueden ser especificativas o explicativas.En español éstas son
explícitas y se introducen por un pronombre relativo que realiza una función
sintáctica dentro de la oración subordinada: El hombre [[que] viste
ayer] es el presidente.
"Los alumnos,
que eran muy listos, acertaron la respuesta".
·
Adverbiales: Las
reconocemos porque podemos sustituirlas por un adverbio.
Generalmente la proposición subordinada desempeña la función de complemento circunstancial de la
proposición principal. Se clasifican en circunstanciales y no circunstanciales.
"He colocado el
cuadro donde me dijiste".
·
Adjetivas sustantivadas: Cuando el pronombre relativo (que, cual quién) que
puede ir precedido de artículos, no tiene un antecedente expreso en la
proposición.
"El que llamó
era mi abuelo".