Señoritas y jóvenes, lean el siguiente artículo y luego procedan a analizarlo y sintetizarlo en sus cuadernos (pueden utilizar resúmenes u organizadores gráficos)
Por favor hacer extensiva la tarea a todos los compañeros de ambas seccione.
El trabajo será revisado por el Prof. Eduardo Choque o el Auxiliar Carlos Almonte el día martes 24 (3°A) y miércoles 25 (3°B)
IDIOMA ESPAÑOL
EN EL PERÚ
El idioma español es hablado en el Perú desde 1532 y en la
actualidad, se expresan en cuatro variedades en su territorio, que involucran
al 70% de sus habitantes.
HISTORIA
El idioma español llegó al Perú en 1532 en sus dialectos
extremeño, andaluz y canario de la época, recibiendo poco después fuerte
influencia del Dialecto castellano.
En un inicio fue hablado sólo por los españoles y los
mestizos de las ciudades, el mundo rural andino continuó hablando el quechua,
aimara y las demás lenguas indígenas por cuatro siglos, siendo mayoritarias
hasta la primera mitad del siglo XX. Luego de entonces, la discriminación
anti-indígena, la imposición del español por parte del gobierno peruano, la
irrupción de los medios de comunicación masiva y la migración rural después de
1940 reconfiguran el mapa dialectal del Perú.
DIALECTOS EN EL PERÚ
ESPAÑOL ANDINO
Es el típicamente empleado en la sierra (más marcado en el
ámbito rural). A diferencia de países limítrofes como Ecuador o Bolivia donde
es el habla estándar, tradicional fue siempre estigmatizado por la sociedad
culta limeña.
Principales
características
En lo fonológico se distingue típicamente por su tiempo
lento y ritmo peculiar, asibilación de /rr/ y /r/ y una aparente confusión
entre las vocales /e/ y /o/ con la /i/ y la /u/, respectivamente (lo que en
realidad ocurre es que los hablantes de castellano andino producen vocales
intermedias entre /e/ - /i/ y entre /o/ - /u/). Además de pronunciar con mayor
fuerza que en la costa el sonido de la “s” originalmente apical sin aspirar y
de las consonantes en general, en detrimento de las vocales. Otros rasgos
distintivos son la preservación del sonido lateral de la “ll”, a veces
ultracorrecciones, y el cambio de la “c” y “g” implosivas por “j” /x/.
En cuanto al plano
morfosintáctico son típicos:
La confusión o
unificación del género y número
A ellas lo recibí bien. La revista es caro.
El abuso de los
diminutivos –ito e –ita
Vente aquicito. Sí, señorita, ahí están sus hijos.
El loísmo
Lo echan la agua. Lo pintan la casa.
La duplicación de los
posesivos y objetos
Su casa de Pepe. Lo conozco a ella.
La ausencia de
artículos o su empleo redundante
Plaza de Armas es acá. La María está loca.
Empleo de la
preposición ‘en’ frente adverbios locativos:
Todo caerá en su encima.
Uso de “nomás” y
“pues” después del verbo
Dile nomás pues.
Uso del verbo al
final de la frase
Está enojada dice.
Uso del pretérito compuesto por el simple y del modo
indicativo por el subjuntivo en las subordinadas.
ESPAÑOL PERUANO
RIBEREÑO O LIMEÑO
Hablado por gente adulta de ascendencia limeña o de larga
estadía en la capital o en la costa (y de poco contacto con el grupo social
migrante); tuvo antaño y tiene aún la fama de ser (más en lo que a
pronunciación se refiere) uno de los más casticistas de toda la América ribereña.
Es, pese a ser hablado propiamante por una minoría (alrededor del 15% de la
población de Lima), la base del español peruano “normativo”.
Rasgos
característicos
Las vocales se pronuncian con la misma duración, a diferencia
del dialecto andino en la cual se intercambian las vocales.
La /rr/ y /r/ en todo contexto se pronuncian sin
fricativizar.
La “s” es predorsal y se aspira generalmente en posición
final ante consonante, pero no ante pausa o vocal.
La “j” y”g” (ante e-i) se pronuncian de forma palatal, no
velar, ni aspirada.
La “n” al final de sílaba se pronuncia velar (no alveolar
como en México o Argentina).
La /d/ final se convierte en /t/ o se elide en la gran
mayoría de las palabras.
Existe yeísmo, ya detectable en hijos de andinos nacidos o
criados en Lima, tanto al escribir como al hablar.
Tendencia a eliminar el hiato en las palabras con el sufijo
–ear en las personas de clase baja, principalmente descendientes de andinos.
Descuido en el habla de presentadores, quienes 'popularizan'
voces de replana como 'tronco seco', o fuera de su campo semántico como al no
usar 'profesionalidad'.
Se habla más lento. Ha bajado la frecuencia.
Hay omisión de preposiciones. Influencia de diarios de
'tendencia popular' que resaltan el lenguaje callejero.
Se usa construcciones que son del español americano en
general, pero existen también las que son de origen propio, así mismo términos
y expresiones tradicionales muy frecuentes; el más arraigado de los quechuismos
es la voz familiar “calato” por desnudo.
ESPAÑOL AMAZÓNICO
Se desarrolló especialmente al contacto del español andino y
limeño con las lenguas amazónicas sin que éstas hayan influido mucho. Posee una
distintiva estructura tonal.
Fonéticamente se
caracteriza por:
La sibilante /s/ resiste a la aspiración
Hay confusión de “j” (aspirada en situación interior) con f
(siempre bilabial).
Ej “San Fan”, San Juan
Hay oclusivización de las intermedias /b/ /d/ /g/ en ascenso
tonal con aspiración y alargamiento de la vocal.
Los fonemas /p/ /t/ y /k/ se realizan con una aspiración
La /y/ tiende a africarse (al contrario de la costa).
También hay asibilación, no muy fuerte de vibrantes
El cambio en el orden sintáctico más reconocido es la
anteposición del genitivo.
De Antonio sus amigas
También hay trastornos de concordancia genérica, etc.
ESPAÑOL ECUATORIAL
El español ecuatorial o colombiano-ecuatoriano chocoano o
costeño, que incluye partes de la Costa Norte de Perú, es un dialecto del
idioma español, transición y combinación entre el dialecto caribeño y el
peruano ribereño. Es hablado en la costa pacífica de Colombia y del Ecuador.
Las principales ciudades que tuvieron influencia lingüística en esta región son
Bogotá, Guayaquil y Quito. El centro urbano principal de la región es
Guayaquil. Hay importantes comunidades de raza negra principalmente en la costa
pacífica, como el departamento colombiano de Chocó o la provincia ecuatoriana
de Esmeraldas que le dan un toque "africano" al acento en esta
región.
En el caso peruano este acento es típico del habla
particular de los denominados Afroperuanos y mestizos de la costa norte en lo
que hoy son los departamentos de Lambayeque, Piura y Tumbes. Las comunidades
afroperuanas de la provincia de Morropón por ejemplo; verifican con el hablar
del Español Ecuatorial y con su subdialecto el Español norperuano ribereño, el
cual se desprende del primero como variante meridional del ecuatorial y
continua hasta la ciudad de Trujillo. Pero siendo Lima el principal foco de
irradiación del idioma español en el Perú, estas dos variantes locales tienden
a ser desplazadas por el Español Peruano Ribereño hablado en la ciudad de Lima.
Indudablemente es esta entonación la que diferencia e
identifica a sus hablantes de otras regiones y ha sido motivo de estudio.
Ejemplo: "También Peter Boyd Bowman señalaba en 1953 “la continuidad
fonética entre las costas de Perú (Costa Norte), Colombia y el Ecuador (...)
frente a la de sus provincias andinas”. Estimaba el hispanista norteamericano
que “las fronteras actuales del Ecuador con los países colindantes no
corresponden ni a fronteras naturales, ni a fronteras lingüístico culturales
(se habla el mismo español de ambos lados), ni a fronteras políticas antiguas
(incaicas y coloniales). Por fin, en un estudio reciente, el norteamericano
John Lipski vuelve a considerar la costa norte del Perú como variedad
diferenciada de castellano, de nuevo basándose en rasgos fonéticos"